Toda deuda pendiente, nunca mejor dicho, de cualquier hipotecado, es mejor saldarla el algún momento o, en su defecto, reducirla considerablemente. Ahora bien, ¿cuándo es el mejor momento para hacerlo?
Estarás pensando que antes de decidir cuál es el mejor momento para efectuar el saldo de la deuda, antes que nada, deberemos estar en situación de poder hacerlo y disponer del capital suficiente que quede pendiente por abonar. Antes de “entrar en materia”, ¿sabemos qué significa exactamente amortizar una hipoteca?
Cuando nos referimos a este término, hablamos de la devolución adelantada al plazo estimado del dinero que debemos al banco. Es decir, como decíamos anteriormente, saldar por completo o parcialmente la deuda que tenemos pendiente en lugar de terminar de pagar las cuotas mensuales que queden restantes a vencimiento.
Pues bien, en el post de esta semana, desde Inmhogar Ávila, os explicamos los métodos existentes para poder amortizar tu hipoteca y finalizar el año saldando vuestras deudas pendientes.
A priori, existen dos formas diferentes de poder hacerlo; en primer lugar, podemos amortizar nuestra hipoteca reduciendo las cuotas mensuales. Siguiendo este procedimiento, pagaremos menos cada mes durante el tiempo de duración de la hipoteca, no reducimos tiempo sino importe de cuota . Por el contrario, la segunda opción, sería reducir el plazo de devolución, por lo que pagaremos una mayor cantidad en menos cuotas reduciendo de esta manera los intereses, junto con el tiempo de vigencia de la hipoteca.
La mayoría de las hipotecas siguen el “método francés”, un método que consiste en pagar durante los primeros años una mayor cantidad en forma de intereses en vez de en capital y, a medida que va pasando el tiempo, el pago de los intereses se reduce, ampliando así el pago correspondiente al préstamo.
Teniendo esto en cuenta, el mejor momento para amortizar una hipoteca sería al principio, pues una amortización adelantada nos permitirá pagar menos intereses por la hipoteca.
Ahora bien, este factor no es el único que deberás tener en cuenta si estás pensando en amortizar tu hipoteca, ya que antes de tomar la decisión deberás barajar si te interesa realizar dicha operación.
Por otro lado, en hipotecas de tipo variable, otro factor esencial a tener en cuenta, es la importancia del euríbor que, actualmente, ha alcanzado mínimos históricos. Hay que tenerlo en cuenta antes de tomar ninguna decisión, es más importante de lo que realmente parece, ya que el euríbor determina gran parte de los intereses que pagamos por un préstamo. Si el euríbor está alto, seguramente nos interese amortizar nuestra hipoteca, ya que reduciremos notablemente los intereses a pagar; mientras que, si por el contrario, el euríbor está bajo, llevar a cabo la amortización de la hipoteca puede que no nos sea demasiado rentable, ya que el ahorro que esto nos puede llegar a suponer no será mucho y el sacrificio previo a tener la cantidad que debemos entregar puede que nos pese más que lo que realmente nos vamos a ahorrar.
Siguiendo la línea y el orden de prioridad, otro elemento a tener en cuenta sería la comisión asociada a amortizar una hipoteca. Desde la entrada en vigor de la ley hipotecaria de 2019, las comisiones por amortizar una hipoteca quedaron reducidas considerablemente; por lo que, en comparación con años atrás, se trata de uno de los mejores momentos para tomar esta decisión.
Si hablamos de hipotecas a tipo fijo, la comisión máxima por amortización que el banco puede aplicar es de un 2% en el caso de que el saldo de la deuda se efectúe durante los 10 primeros años del préstamo. Si lo realizamos transcurrido ese tiempo, quedaría reducido hasta el 1,5%.
En el caso de hipotecas de tipo variable, la comisión máxima, amortizando la hipoteca en un periodo de tiempo de tres años, es del 0,25%. Si la amortización se produce en los dos años siguientes, se reduciría hasta un 0,15% y, a partir del quinto año de hipoteca, el banco no podrá penalizar la cancelación anticipada.
Como habrás podido comprobar, se trata de comisiones muy bajas; no obstante, es conveniente tenerlas en cuenta, junto con los factores comentados anteriormente, antes de decidirnos a amortizar la hipoteca.
Todos estos factores que acabamos de mencionar se tratan de elementos que nos ayudarían a ahorrar algo de dinero con nuestra hipoteca, pero en este tipo de situaciones, nunca debemos olvidarnos de otros elementos que pueden influirnos en situaciones de este calibre; y eso nos llevaría al último elemento a contemplar, el “factor psicológico”.
Es importante tener en cuenta nuestro bienestar por encima de todo; si saldar nuestra deuda nos va a suponer malestar psicológico porque necesitamos contar para ello con cierta cantidad de capital, es preferible seguir pagando nuestras cuotas mensuales y dejar de ahorrarnos esa pequeña cantidad de dinero. Pero si, por el contrario, tener una deuda pendiente con el banco te produce una sensación de intranquilidad, plantéate amortizar tu hipoteca teniendo en cuenta los factores que hemos comentado en este post.
Esperamos que toda esta información os haya sido de gran ayuda si teníais algunas dudas acerca de la amortización de una hipoteca y, en el caso de que uno de vuestros objetivos antes de acabar este 2021 fuera liquidar vuestras deudas pendientes, os sirva como guía para cumplirlo.