Una de las dudas más comunes que se pasan por la cabeza a la hora de vender una vivienda, son las reformas; y más aún cuando se trata de propiedades antiguas o de segunda mano.
Y para solventar esta duda os traemos el post de hoy; desde Inmhogar Ávila
, como expertos en el sector de compra-venta de inmuebles, queremos dejaros desde nuestro punto de vista los pros y los contras de reformar una vivienda, y si realmente recuperaremos con plusvalía el valor de la inversión.
¿POR QUÉ ES BUENA IDEA COMPRAR UNA CASA VIEJA PARA REFORMAR Y ALQUILAR?
Cuando nos disponemos a comprar nuestra “casa ideal”, ya sea para vivir en ella o buscar hacer una inversión para su posterior venta, siempre buscamos algo que nos guste, que nos encaje con nuestro prototipo idealizado de hogar y que, muchas veces como se suele decir, “nos entre por los ojos”; pero en ese aspecto estamos muy equivocados, ya que, si nos paramos a pensar detenidamente, una buena decisión, nos encontremos en situación de buscar nuestro futuro hogar o de hacer una buena inversión, sería comprar una casa vieja; y te preguntarás por qué. Pues bien, comprando una casa vieja, entran en juego muchas ventajas que, a su vez, nos abrirán un auténtico abanico de pros que podremos usar a nuestro favor.
Una casa vieja, como es de esperar, necesitará reformas; lo que nos lleva a un precio más bajo por el que podremos adquirirla, teniendo en cuenta que el necesitar reformas es una carta a nuestro favor, ya que siempre podremos usarlo como pretexto a la hora de la negociación. Pero además, las casas viejas por norma general, suelen encontrarse en el centro, cumpliendo uno de los objetivos más buscados y demandados; una buena ubicación. Y como plato estrella hemos dejado lo mejor para el final; que se trate de una casa vieja, supone poder reformarla y dejarla completamente a tu gusto, cumpliendo nuestro objetivo inicial de búsqueda, invertir lo que hemos previsto para que la rentabilidad nos cuadre.
Y como ya comentamos anteriormente, son muchos los pros que se nos presentarán a raíz de elegir como objetivo una casa vieja, queriendo resaltar dos en concreto:
REVALORIZACIÓN DE NUESTRO INMUBLE.
Una vez llevada a cabo la operación, claro está que los intereses de reformar una vivida ya sea para vivir en ella o para alquilar, son algo diferentes; pero en ambos casos, uno de los objetivos comunes deseados con la consiguiente reforma, es la revalorización del inmueble; pero que realmente ésta sea efectiva o no, dependerá de muchos factores. Lo primero, como era de esperar, su precio de compra; si se trata de una “buena operación” y hemos adquirido una vivienda a un buen precio, es prácticamente seguro que reformar esta vivienda elevará su precio final, mejorando además su imagen y confort. Pero todo pro tiene su contra; por ello, también hay que tener en cuenta el precio de venta medio de mercado que haya en la zona dónde se encuentra el inmueble, así como sus dimensiones.
MAYOR MARGEN DE BENEFICIO.
Otro pro que nos traerá realizar una reforma de la vivienda adquirida, será su margen de beneficio. Como comentábamos anteriormente, al comprar una vivienda vieja, estamos adquiriendo una casa que necesitará mucha actualización, no obstante con un precio más bajo, lo que nos dejará un margen mayor para invertir en la reforma aumentando su precio y aportándonos un mayor beneficio y rentabilidad en alquiler.
Y no penséis que solo lo harán aquellas personas que posteriormente lo pondrán en venta o alquiler, ya que si se trata de tu nuevo hogar, revalorizarlo nunca está de más y habrás llevado a cabo una buena operación ahorrándote dinero con el resultado final.
Sin embargo, antes de “tirar la casa por la ventana” y empezar a llevar a cabo la reforma, hay que meditar detenidamente qué cambios son prioritarios y la manera más económica de llevarlos a cabo, sobre todo si tu idea es poner posteriormente la vivienda en venta o alquiler. Otra manera de asegurarnos una buena operación, es esperar el momento oportuno para comprar el inmueble y reformarle, sin quedarnos con lo primero que veamos y esperando a la vivienda que se adapte tanto a nuestro presupuesto como a la idea que tengamos en mente.
Como habréis podido comprobar, las ventajas de llevar a cabo una reforma en una vivienda, bien sea para su uso o su posterior venta o alquiler, son muchas, siempre y cuando se haga de la manera adecuada para optimizar recursos y beneficios. Por eso, desde Inmhogar Ávila, como expertos en el sector inmobiliario, ponemos a vuestra disposición todo nuestro conocimiento del mercado actual, pudiendo asesorar a nuestros clientes sobre qué tipo de inversión y reforma les resultaría más beneficiosa.